Buenos Aires (EFE).- Cientos de ciclistas acompañaron este sábado al ciclista argentino José ‘Maligno’ Torres Gil, campeón olímpico en la prueba de BMX estilo libre en París 2024, en una ‘vuelta olímpica’ en la ciudad de Córdoba (centro de Argentina), donde reside, con una ‘bicicleteada’ y una demostración de sus destrezas.
Grandes y chicos con sus bicicletas vivaron y se sacaron fotos con el ¨Maligno¨, vestido de negro, con gorra y anteojos espejados de sol, que llegó con una bandera argentina sobre el manubrio de su bicicleta, en esta mañana soleada y fresca, según las imágenes difundidas por el Gobierno de la provincia de Córdoba.
‘La Vuelta Olímpica’ recorrió 3,5 kilómetros en un circuito que une simbólicamente las dos pistas de BMX del ‘Maligno’. Estas pistas, donde se formó el talentoso ciclista, están ubicadas en el Parque de las Naciones y el Parque del Kempes.-
Maligno y la fiesta en dos ruedas
El propio ¨Maligno¨ sacaba fotos mientras andaba en bicicleta entre la multitud, hasta llegar al ´Maligno Park´ en el Parque del Kempes.
La bicicleteada se acompañó de DJ en vivo, shows de destrezas de BMX y un sorteo al final, organizada por el Gobierno de Córdoba y su ciudad capital en reconocimiento al atleta, que a los 29 años conquistó París el pasado 31 de julio al conseguir la primera y única medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 para Argentina cuando se impuso en BMX Freestyle.
El ´demoshow´ de BMX comenzó con las piruetas de su hermano mellizo, Francisco Torres Gil, recuperándose de una lesión en la espalda, y un niño de ocho años, entre otros ciclistas, en una pista decorada con la foto del campeón besando la medalla, escoltada con gradas completas de fanáticos, a las que se sumó la caravana de ciclistas que llegó con Torres, quien siguió saludando y sacándose fotos.
Espectáculo de altura
El ‘Maligno’ comenzó con un calentamiento, mostrando una ‘backflip tailwhip’ suave, una 720, una ‘frontflip’, una ‘backflip’ y una ‘double tailwhip’. La audiencia gritó, y continuó con una seguidilla de trucos junto a su equipo de ciclistas, incluyendo un ‘backflip’ más alto.
Agitado, Torres contó que la idea de esta vuelta olímpica surgió cuando los medios le preguntaron en la villa olímpica en París. Cuando le preguntaron qué iba a hacer al llegar a Córdoba, les contestó que le “gustaría hacer una pedaleada”.
El medallista olímpico, nacido en Bolivia pero con doble nacionalidad, siguió con una rutina de competencia mostrando una ´transfer 720´, un ´flair´ muy alto y se ganó un aplauso con una ´transfer double tailwhip´.
Maligno, entre aplausos y agradecimientos
Finalizó levantando la bicicleta sobre su cabeza en una loma de la pista, donde su hermano le entregó la medalla de oro.
“Al principio, estaba nervioso porque no sabía si me iban a acompañar”, se sinceró Torres.
“Lo más importante, lo que más quería es que ustedes pudieran disfrutar un poquito, conocer un poquito más nuestro deporte, que los niños se acerquen para poder ver qué es lo que hacemos”, dijo.
“No esperaba el apoyo gigantesco que tenemos hoy en día”, agregó.
El deportista agradeció al gobierno y al municipio, destacando que la medalla de oro es fruto de “un trabajo muy largo, de muchos años.”
A pesar de las lesiones que “va a tratar” de recuperar, aún le espera una competencia en Brasil y, además, pronto otro viaje a Japón.