El Cairo (EFE).- El líder paramilitar sudanés, Mohamed Hamdan Dagalo, ha anunciado la formación de un Gobierno paralelo de «paz y unidad» en Sudán, que dijo que sustituirá al Ejecutivo controlado por el Ejército regular, y juró continuar la guerra civil en el país africano que este martes entra en su tercer año.
En un discurso en Telegram, el líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) instó a la Unión Africana (UA) a reconocer su Gobierno, que calificó de «voluntad democrática del pueblo sudanés», en tanto pidió al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a actuar para «poner fin a la guerra» en Sudán.
«En este (segundo) aniversario (de la guerra) anunciamos con orgullo el establecimiento de un gobierno de paz y unidad que representa el verdadero rostro de Sudán», dijo Dagado, alía Hemeti, y afirmó que su Ejecutivo «representará una carta política y una constitución de transición histórica para un nuevo Sudán».
Aseguró que su gobierno no actuará sólo en las regiones controladas por las FAR, sino «en todo Sudán», y adoptará medidas ejecutivas, incluida «la impresión de una nueva moneda y la emisión de documentos de identidad nacionales, para garantizar que ningún ciudadano sudanés se vea privado de sus derechos básicos».
El acuerdo firmado en febrero
El anuncio se produce después de que las FAR y otros varios grupos civiles y rebeldes firmaran en febrero pasado en Nairobi un entendimiento para la formación de un Gobierno paralelo, y aseguraran que ese paso tenía como objetivo poner fin a la devastadora guerra que azota el país desde el 15 de abril de 2023.
El conflicto, que ha convertido a Sudán en escenario de la peor crisis humanitaria del planeta, se desató tras el fracaso de las negociaciones para incorporar a los paramilitar en el Ejército en el contexto de un proceso de transición política en el país.
Desde su inicio la guerra ha provocado la muerte de decenas de miles de personas y el desplazamiento de más de 12 millones, más de tres millones de ellos se refugiaron en países vecinos, en especial Sudán del Sur, Chad y Egipto.
Avances del Ejército regular
El anuncio de Hemedti se produce en medio de continuos avances del Ejército regular, que en los últimos meses ha expulsado a los paramilitares del este del país, así como de Jartum y la mayor parte de las localidades que controlaban en las ciudades vecinas de la capital, como Omdurmán.
Las tensiones entre Sudán del Sur y Sudán se disparan por el conflicto y la crisis política
Las FAR controlan así algunas regiones de Kordofán (centro), además de los cinco estados de la extensa zona de Darfur, con excepción de Al Fasher, capital del estado de Darfur Norte y único bastión del Ejército en el oeste del país, con fronteras con Libia y Chad.
Los paramilitares han intensificado en los últimos días sus ataques contra Al Fasher, y justo antes del segundo aniversario de la guerra anunciaron la toma del mayor campamento de desplazados situado en las afueras de esa ciudad.
En ese campamento, Zamzam, murieron al menos 400 personas desplazadas y más de 400.000 volvieron a desplazarse a otros sitios, según la ONU.
La actual situación en el terreno hace que Al Fasher se convierta en un «punto crucial» en el conflicto ya que, según expertos árabes y locales, podría servir de base para el gobierno paralelo de Hemedti en caso de su eventual caída en manos de los paramilitares.