Por Augusto Morel |
Buenos Aires (EFE).- Cientos de fieles se congregaron el pasado miércoles en torno al santuario de San Cayetano para encomendarse al patrono del pan y del trabajo, rezando por mejorar sus condiciones de vida y “creyentes por necesidad” ante la falta de perspectiva a futuro en Argentina, con índices de pobreza superiores al 50 %.
La concentración de este año tuvo como elemento destacado la posterior presencia de movimientos sociales y sindicatos opositores al Gobierno, que marcharon desde la parroquia hasta Plaza de Mayo, donde está la sede del Gobierno, reclamando ‘Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo’ ante las medidas de ajuste del Ejecutivo del ultraliberal Javier Milei.
Argentinos piden en San Cayetano por empleo y pan
Desde antes del amanecer, la fila para visitar la parroquia en el barrio de Liniers, en Buenos Aires, estaba repleta de feligreses con una estampita del santo y una espiga de trigo para ser bendecida; algunos para “agradecer” o “cumplir la promesa” por lo que él ya les dio, otros pidiendo que nunca les falte el pan o el trabajo a sus familias.
“Vine a cumplir con el Santo, porque él cumple conmigo”, comentó a EFE Mary, una jubilada que cada 7 de agosto le agradece por que sus hijos, su nuera y su esposo todavía tienen trabajo.
Durante el primer trimestre de gestión de Milei, que empezó el 10 de diciembre, el 7,7 % de los argentinos permanecen sin empleo, dos puntos más que el trimestre anterior.
Mary contó que su jubilación no le alcanza para vivir, pero que tiene fe en el Gobierno que eligió; para tomar una precaución extra, siempre le enciende una vela en honor al ‘padre de la providencia’ antes de salir de casa.
La celebración empezó con una vigilia cerca del templo hasta el inicio de las primeras misas desde las 4:00 hora local (7:00 GMT) hasta la medianoche. Al ingresar, la figura del santo protegido por una vitrina les da la bienvenida, mientras los fieles apoyan sus manos, las estampitas, las espigas o fotos de sus seres queridos y murmuran una oración.
“Te sentís renovado, con más esperanza y fe, de que todo va a mejorar y uno lo retribuye con trabajo, porque no podés sentarte o arrodillarte para rezar pidiendo sin hacer el esfuerzo necesario. Es una forma de recargarse de energías para seguir peleando”, relató a EFE William Artundaga, que, desde hace 17 años, agradece por tener pan en su mesa.
Más de la mitad de la población es pobre
Según un informe académico del Observatorio de Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) del primer trimestre de 2024, el 54,9 % de la población es pobre y uno de cada cinco argentinos es indigente. Los últimos datos oficiales datan del segundo semestre de 2023, cuando la pobreza llegaba al 41,7 % y la indigencia al 11,9 %.
Pese a la situación actual, William mantiene la confianza que le dio el santo tras renunciar a su antiguo empleo para iniciar un emprendimiento propio. En sus manos portaba una botella con agua bendecida que usará para limpiar su hogar, beberla y compartirla junto a sus seres queridos.
Por su parte, Laura es devota hace 22 años y esta vez se acercó para pedirle a San Cayetano por su salud. Es dueña de panaderías, pero la falta de ventas la obligaron a cerrar un local y está a punto de clausurar otro. Pese a todo, confesó estar “agradecida” por sobrevivir.
La inflación interanual escaló en junio pasado en Argentina al 271,5 % y a un 4,2 % mensual bajo un aumento destacado en alimentos básicos como verduras, pan, cereales y leche.
Tristeza por la situación
“En la gente se nota mucho la tristeza por la situación que estamos pasando. Para mí está peor que otros años y en momentos de crisis la gente se acerca más al santo. Buscan consuelo y absolución, se aferran más a la fe, son creyentes por necesidad”, explicó a EFE Cristina Escalante, quien hace 30 años visita la parroquia.
En torno al mediodía llegaron las columnas reivindicativas para marchar hacia Plaza de Mayo.
El dirigente social Juan Grabois, exprecandidato presidencial peronista, declaró que esta marcha es un “llamado de atención” a todo el arco político y para reflejar el 70 % de niños pobres en Argentina.
Por su parte, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, lamentó en su habitual comparecencia en Casa Rosada que “en una fecha religiosa como esta, donde la gente asiste de buena fe y con el deseo de salir adelante”, haya “figuras políticas responsables del desastre” económico de Argentina, en alusión a precedentes gobiernos peronistas.