Cuatro de cada 10 adultosmexicanos, el 40.4 por ciento, consumen alcohol en exceso, mientras que casi 14 por ciento de los adolescentes tienen los mismos patrones, alertaron organizaciones civiles, que pidieron una política pública para reducir la muerte y violencia asociadas al consumo de alcohol.
“No solo es un problema de salud pública, también es un problema que desafía el desarrollo social y económico de los países. Necesitamos prestar atención ahí”, señaló en una conferencia de prensa Juan Arturo Sabines, de la Red de Acción sobre Alcohol (RASA).
De acuerdo con datos de la organización, anualmente se registran en el mundo 2.6 millones de muertes por causas relacionadas al consumo del alcohol, mientras que en México 40 mil personas fallecen por esta situación.
El alcohol, mencionó Sabines, es también un factor de descomposición social pues se relaciona de manera directa a conductas y comportamientos agresivos, particularmente de los hombres.
“Esta relación con la violencia, no solo tiene que ver con el número o el porcentaje de actos que se relacionan, sino también con la intensidad de la violencia. Cuando se consume alcohol se incrementa la incidencia, pero se incrementa también la gravedad de la violencia”, enfatizó.
Preocupa consumo
En el evento, se presentaron los resultados de la encuesta ‘RESET México 2024‘, realizada por Vital Strategies, que reveló que el 83 por ciento de la población ha consumido alcohol alguna vez en la vida.
También, arrojó que el 97 por ciento de los encuestados mostraron preocupación por los efectos del alcohol, especialmente en la violencia contra la mujer.
“Hay una generalización, y una gran mayoría que está entendiendo, que estamos en un problema por la cantidad de alcohol que se consume a nivel nacional y por las diferentes actitudes que tenemos en torno, por ejemplo, a la violencia”, señaló Benjamín González Rubio, gerente de comunicación de Vital Strategies.
En este contexto, las organizaciones presentaron la campaña ‘El alcohol daña a quien más amas’, centrada en evidenciar la relación entre el consumo de bebidas alcohólicas y la violencia, con énfasis en violencia intrafamiliar y de género.
Alejandro Calvillo, director de la organización El Poder del Consumidor, refirió que esta campaña surge “por una desregularización comercial del alcohol, por una falta de política nacional sobre el alcohol, por sus bajos precios, y su altísima disponibilidad”.
Afirmó que esto tiene que ver con “una gran presencia” de la industria del alcohol y su relación con los poderes Ejecutivo y Legislativo, y recordó que en estados como Tamaulipas, en la frontera norte, el 54 por ciento de las llamadas de mujeres denunciando violencia doméstica dicen que el agresor consumió alcohol.
“Entonces, si estamos entrando en un gobierno donde va a estar al frente una mujer (Claudia Sheinbaum), donde supuestamente hay un compromiso en primer lugar para enfrentar estas violencias contra las mujeres, pues creo que a una de las primeras cosas que se tendría que hacer es presentar una política nacional sobre consumo de alcohol”, exigió Calvillo.
En tanto, Yahaira Ochoa, coordinadora de comunicación en Salud Justa Mx, destacó la importancia de hacer análisis y, por lo tanto, campañas con perspectiva de género.
Con información de EFE