Caracas (EFE).- La dirigente opositora de Venezuela María Oropeza, colaboradora regional del antichavista Edmundo González Urrutia, fue detenida la noche de este martes por funcionarios del “régimen”, denunció la exdiputada María Corina Machado, quien exigió su “inmediata” liberación.
“El régimen acaba de llevársela por la fuerza y no sabemos dónde se encuentra. ¡La secuestraron! Le pido a todos, dentro y fuera de Venezuela, que exijamos su libertad inmediata”, expresó en X Machado, quien describió a Oropeza, jefa del equipo de González Urrutia en el estado Portuguesa (oeste), como una “joven extraordinariamente valiente, inteligente y generosa”.
Denuncia de la detención de la colaboradora
Partidos que forman parte de la oposición mayoritaria -agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD)-, entre ellos Primero Justicia (PJ), Voluntad Popular (VP) y Vente Venezuela (VV), también denunciaron la detención de Oropeza, que calificaron de “arbitraria”.
VV -formación liderada por Machado- indicó que funcionarios de la “Dgcim (Dirección General de Contrainteligencia Militar)” entraron en el lugar donde se encontraba “a la fuerza y sin orden judicial”.
“Operación tun tun”
Horas antes, Oropeza había alertado, a través de X, de una “operación tun tun (de detención)” que supone -denunció- una “persecución política contra los venezolanos que defienden la verdad”, en referencia al triunfo que la PUD insiste que obtuvo González Urrutia en las presidenciales del 28 de julio, pese a que el Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró ganador al mandatario Nicolás Maduro.
“La verdad es que Edmundo González Urrutia es el presidente electo de Venezuela, elegido por una inmensa mayoría el pasado 28 de julio. Seguimos luchando hasta el final junto a María Corina Machado”, dijo la dirigente opositora regional.
Esta detención ocurre cuando Maduro denuncia un golpe de Estado en su contra, luego de que el CNE lo proclamara ganador, tras lo que se registraron múltiples protestas en rechazo al resultado oficial, acciones que las autoridades califican como “terroristas” y de las que acusa al bloque opositor.
Esas manifestaciones se han saldado, según datos oficiales, con 2.229 detenidos, a los que se les atribuyen diversos delitos.
De acuerdo con el Gobierno, al menos 59 funcionarios policiales y 47 efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) resultaron heridos, mientras que dos militares fallecieron.
A estas dos víctimas mortales se suman, de acuerdo con la ONG Provea, 24 civiles muertos, algunos de ellos “asesinados” por efectivos de la fuerza pública o grupos irregulares armados, una aseveración que no ha sido confirmada ni comentada por las autoridades.