Lima (EFE).- El primer ministro de Perú, Eduardo Arana, planteó este jueves ante el pleno del Congreso la creación de una comisión especial que se encargue de evaluar la continuidad de su país en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos (DD.HH.).
Arana señaló que esta petición la hace el Ejecutivo «consciente de que la permanencia de Perú en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos es un aspecto de sumo interés para el Congreso de la República y la ciudadanía en general».
El planteamiento se conoció mientras el país sufre un embate de la criminalidad, que ha llevado a la presidenta peruana, Dina Boluarte, a plantear la aplicación de la pena de muerte, mientras que el Congreso debate una amnistía para militares y policías con denuncias, juicios o sentencias por delitos cometidos durante el conflicto interno que asoló al país andino entre 1980 y 2000.
El Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH), creado por la Organización de Estados Americanos (OEA), se encuentra integrado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).
Primer ministro de Perú justifica su posición frente al Sistema Interamericano de DD.HH.
El primer ministro de Perú recordó que la Constitución peruana establece que «es potestad del Ejecutivo adoptar una decisión soberana» sobre el tema, pero dijo que «como demócratas» proponen ante el Congreso la creación de la comisión «para evaluar, estudiar y proponer de manera seria y responsable una decisión consensuada sobre la continuidad del Perú en dicho sistema».

Planteó que esa comisión esté integrada por representantes del Ejecutivo, el Legislativo, la sociedad civil, la academia y las instituciones y organismos competentes.
Arana se presentó este jueves ante el pleno del Congreso para exponer la política general de Gobierno y solicitar el voto de confianza a la gestión que empezó hace casi un mes, tras la renuncia de Gustavo Adrianzén al Ejecutivo.
Si la confianza resulta rechazada, Arana deberá dimitir de inmediato al cargo junto con todos los ministros, para que la presidenta Boluarte pueda formar un nuevo gabinete.
«Un momento crucial»
«Vengo ante la representación nacional con la responsabilidad que exige mi función y con la claridad que demanda el momento que vivimos», señaló al abrir su presentación ante un hemiciclo que, al inicio de la sesión, solo contaba con la presencia de 62 de los 130 legisladores.
El ministro detalló «los pilares» de su gestión que, según dijo, «se realiza en un momento crucial» para su país, ante la ola de criminalidad, que se ha incrementado en los últimos meses.
Arana juró como primer ministro el pasado 14 de mayo, un día después de que Adrianzén renunciara, poco antes de que el pleno del Congreso debatiera cuatro mociones de censura que se habían presentado en su contra acusándolo de «incapacidad» para resolver el aumento de la violencia y la inseguridad en el país.