El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, expresó su optimismo sobre la posibilidad de renegociar en 2026 el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) bajo el nuevo mandato de Donald Trump, ganador de las presidenciales en EE.UU.
Al término de la Asamblea Anual de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), Ebrard confió en que el acuerdo comercial es el “mejor negocio” que México y Estados Unidos han realizado en conjunto, y los datos comerciales recientes confirman su éxito.
“Los datos que publicó la Oficina del Censo de los EE.UU. son muy buenos para México. Somos el socio número uno de Estados Unidos, tanto en exportación, como en importaciones”, comentó.
Detalló que, en 2024, las exportaciones mexicanas a EE.UU. crecieron 6.5 por ciento, mientras que las importaciones desde el vecino del norte aumentaron 4.7 por ciento, cifras que dijo, representan una oportunidad para México y para el diálogo con el equipo de Trump, pues aseguró “es la base de la relación” bilateral.
Ebrard destacó que el T-MEC, negociado en la primera administración de Trump, ofrece una base sólida para la relación bilateral, enfatizando la importancia de mantener el tratado para enfrentar la competencia asiática.
“Tenemos una economía muy vigorosa y una gran oportunidad para nuestro país (…) Hace seis años estaba más difícil (negociar el acuerdo comercial de Norteamérica) porque era una idea, hoy es una realidad”, comentó Ebrard.
Añadió que la posición de México como socio comercial prioritario de Estados Unidos favorecerá un entorno de estabilidad y continuidad en la relación comercial.
Si bien el sector privado y algunos analistas han manifestado su preocupación por la amenaza de Trump de imponer aranceles a los productos mexicanos y cómo pueda afectar su política económica a la relocalización de empresas en México, Ebrard confió en que la estructura del T-MEC y los lazos industriales entre ambos países deberían mitigar estos riesgos.
En tanto, la visita reciente de figuras clave del mercado, como Larry Fink de BlackRock, quien respaldó al Gobierno de México, fue señalada por Ebrard como un indicio de confianza en el futuro económico del país y el éxito del T-MEC.
“Va a ser efectiva y va a ser buena (la relación México-EE.UU.), porque estás hablando con el presidente de los Estados Unidos que encabezó esa negociación, por qué habría de estar en contra de algo que él promovió y que además tiene buenos resultados. ¡Vamos a ser un tigre!”, concluyó.
Con información de EFE