Naciones Unidas (EFE).- Las grandes potencias defendieron este miércoles en la ONU la figura del secretario general António Guterres, declarado hoy ‘persona non grata’ por Israel -que además le ha prohibido su entrada en el país- aunque no todas lo hicieron con el mismo énfasis.
En una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad, y delante del mismo Guterres, quien no hizo alusión a esa declaración de Israel, el embajador ruso Vasili Nebenzia fue el más rotundo: esa declaración “es una bofetada no solo a la ONU, sino a todos nosotros. Llamamos a todos los miembros del Consejo y a la ONU a reaccionar contra este acto indignante”, dijo el diplomático.
Respaldo a la gestión de Guterres y la ONU en el conflicto
El embajador de China, Fu Cong, en la misma línea, dijo que quería “reiterar el apoyo decidido de China al secretario general por su trabajo, y oponernos a las acusaciones sin base que Israel ha proferido contra él”.
El embajador francés, Nicolas de Rivière, no citó a Israel, pero sí quiso subrayar que Guterres “tiene el apoyo total y la confianza de Francia”, mientras que su colega británica Barbara Woodward también destacó su “apoyo total e inequívoco a él y a toda la ONU por cómo está manejando la crisis”.
Ya es hora de un alto el fuego inmediato en #Gaza, con la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes, la entrega efectiva de ayuda humanitaria a los palestinos de Gaza y el avance irreversible hacia una solución de dos Estados.@antonioguterres pic.twitter.com/FDS9Yj5XeP
— Noticias ONU (@NoticiasONU) October 2, 2024
Faltó un mensaje similar del quinto miembro permanente del Consejo de Seguridad, Estados Unidos, aliado inquebrantable de Israel. Su embajadora, Linda Thomas-Greenfield, no hizo la menor alusión al asunto, y se limitó a agradecer a Guterres su discurso de hoy ante el Consejo.
De entre los demás países, destacó el mensaje de Argelia, cuyo embajador, Amar Bendjama, expresó “la solidaridad total de Argelia y la admiración y apoyo al secretario general tras la increíble decisión” de Israel, una decisión que “refleja un claro desdén del sistema de la ONU y de la comunidad internacional por completo”.