Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- El personal del Centro Insular de Deportes de Gran Canaria (CID) se sentará el lunes, 11 de noviembre, en una mesa negociadora con el Cabildo para intentar “encauzar” una respuesta a la situación de trabajadores y usuarios del recinto ante el inminente inicio de unas obras que obligarán a su cierre temporal.
En una asamblea mantenida este martes con decenas de usuarios del espacio deportivo, representantes de los trabajadores han querido informar sobre la situación por la que atraviesan para que todo el mundo tuviera ese conocimiento y han pedido que se siga luchando hasta el final, para lo que han encontrado el apoyo unánime de los allí presentes.
Al grito de “Cabildo negociación” y “No nos vamos”, las decenas de personas que se congregaron en torno al CID han clamado por soluciones a la Consejería de Deportes, que dirige el socialista Aridany Romero, no solo para el personal -ocho de los más de 30 trabajadores ya han sido despedidos antes de alcanzar un acuerdo-, sino también para los usuarios de las instalaciones.
El representante de los trabajadores, Joao Raúl da Silva, ha explicado a EFE que en dicha mesa negociadora, en la que estará el Cabildo y la concesionaria, Clece, intentarán llegar “a un acuerdo que sea factible para salvaguardar los puestos de trabajo y también para buscar una solución para los usuarios”.
Posibilidad de implantar ERTEs
Lo que ellos pondrán sobre la mesa será la posibilidad de que el Cabildo, ya que el contrato con Clece dejó de estar en vigor desde 2018 y no se ha renovado, ponga a la plantilla en expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) mientras duren las obras.
“No estamos pidiendo una subida de salarios, ni mejoras en las condiciones laborales, porque esas se van a dar cuando el recinto esté renovado”, ha apuntado da Silva.
Y, si hay posibilidades, que una parte de la plantilla pueda ser reubicada en otros espacios con las misas condiciones laborales que tenían y respetando su antigüedad.
Una propuesta que, ha agregado, cuenta con un informe jurídico que también pondrán a disposición de las partes el próximo lunes y que considera es una “buena solución para las tres partes”.
Sobre las alrededor de 3.500 personas que son ahora mismo usuarias habituales del CID, el representante de los trabajadores ha admitido que sí puede ser complicado reubicarlas en otros espacios, pero que han propuesto al Cabildo la opción de que acondicione ciertos locales cercanos a esta instalación deportiva para que puedan albergar algunas de las actividades que se desarrollaban.
Una solución que, entiende, no supondría un gran desembolso de dinero para la institución insular, pero que sí requiere “un poco de voluntad y trabajo por su parte, obviamente”. EFE