Santa Cruz (Bolivia) (EFE).- Los seguidores del líder opositor y gobernador suspendido de la región de Santa Cruz (Bolivia), Luis Fernando Camacho, realizaron una caravana al cumplirse los dos años de su detención por delitos que supuestamente cometió durante la crisis política de 2019.
La movilización comenzó al atardecer y recorrió varias avenidas de la ciudad de Santa Cruz, con paradas momentáneas en monumentos simbólicos hasta llegar hasta el canal Pero Vélez, en donde hace dos años un grupo especial de la Policía detuvo a Camacho.
Seguidores del gobernador suspendido se toman las calles de Santa Cruz
La caravana juntó a cientos de automóviles y motocicletas ocupados por personas que en su mayoría lucían algún distintivo como camisetas o banderas blancas, además de la enseña regional verde, blanco y verde.
La protesta terminó con la lectura pública de una carta que escribió Camacho desde su reclusión en el penal de Chonchocoro, en La Paz, a cargo del asambleísta departamental Zvonko Matković.
En el escrito, Camacho recalcó que su detención fue un «secuestro» que se planeó por parte del Gobierno de Luis Arce y exhortó a la población boliviana a consolidar «la unidad democrática» de la oposición como «único camino» para derrotar al oficialismo.
El suspendido gobernador cruceño indicó que «la unidad no es una opción electoral, es un deber moral» y pidió trabajar en ella «sin condiciones».
Expresidentes de Bolivia firman buscar una candidatura única
El pasado 18 de diciembre, los principales líderes de la oposición como los expresidentes de Bolivia Carlos Mesa (2003-2005) y Jorge ‘Tuto’ Quiroga (2001-2002), junto al empresario Samuel Doria Medina y la representación de Camacho firmaron un acuerdo para buscar una única candidatura presidencial y sacar del poder al Movimiento al Socialismo (MAS).
Mesa escribió este sábado en sus redes sociales que Camacho sufre «encarcelamiento ilegal» y señaló que «su liberación y la de todos los perseguidos en Bolivia es un imperativo y una deuda que saldaremos tras las elecciones de 2025».
«Luis Fernando Camacho es uno de los protagonistas imprescindibles de la historia democrática. Su visión y valentía han modelado la salida de libertad que se vislumbra en 2025», expresó a su turno Doria Medina.
Mientras que el expresidente Quiroga acompañó por la mañana a los familiares de Camacho, quienes participaron en una misa en la catedral de Santa Cruz.
Esta jornada se cumplen dos años de la detención de Camacho durante un cuestionado operativo en el que fue trasladado de la oriental Santa Cruz a La Paz, en el occidente del país, a raíz de una denuncia por los hechos de 2019, el caso «golpe de Estado I», por el que inicialmente se lo detuvo.
Camacho, quien en 2019 fue presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, protagonizó varias de las movilizaciones que derivaron en la renuncia del entonces presidente Evo Morales (2006-2019) en medio de denuncias de un fraude electoral tras los anulados comicios de ese año.
«Golpe de Estado» en 2019, según el oficialismo boliviano
Para el oficialismo y Morales, los hechos de 2019 se debieron a un «golpe de Estado» en contra del entonces mandatario.
El juicio por el caso «golpe de Estado I» comenzó el 17 de octubre y se reinstalará el próximo 6 de enero a la espera de que se dicte una condena.
En este proceso estaba acusada la exmandataria interina Jeanine Áñez (2019-2020), quien fue apartada por «doble juzgamiento» al tener ya una sentencia de 10 años de prisión por situarse indebidamente en línea de sucesión constitucional.
También están acusados varios exaltos mandos militares y policiales de 2019 y dos exministros de Áñez, Arturo Murillo, extitular de Gobierno (Interior), en prisión en Estados Unidos por un caso de soborno y lavado de dinero, y el de Defensa, Fernando López, quien está en Paraguay.