Túnez vota con la reelección de Kais Said previsiblemente asegurada

Túnez (EFE).- Más de 9 millones de tunecinos están llamados a votar este domingo entre el poco conocido líder del Movimiento del Pueblo, Zuhair Magzhaui; un candidato en prisión, Ayachi Zamel; y el presidente de Túnez, Kais Said, que será previsiblemente reelegido.

La cuna de la Primavera Árabe celebra sus terceras presidenciales desde que el país iniciara un proceso de transición hacia la democracia que la oposición ve hoy en peligro, y se debate entre el boicot o el apoyo a Zamel para dificultar la mayoría del presidente en la primera vuelta.

En total 9.753.217 de ciudadanos, el 32,6% menor de 35 años y un 50,4% de mujeres, de los que 642.819 (el 6,6%) pueden votar desde este viernes en las representaciones diplomáticas de 59 países.

Candidatos detenidos o procesados

Las elecciones presidenciales de Túnez se celebrarán el próximo 6 de octubre

Las elecciones se celebran en un “clima de miedo y represión”, denuncia sociedad civil y partidos políticos que ayer convocaron una manifestación de rechazo en el centro de Túnez, y una aparente indiferencia ciudadana preocupada por la crisis económica estructural y el alto desempleo por encima del 15%.

La polémica precede a la cita electoral debido al registro de candidatos, algunos de los cuales fueron detenidos o procesados, y después de que una reforma electoral de última hora retirara las competencias al Tribunal Administrativo que había solicitado la admisión de tres destacados aspirantes.

Said fue elegido democráticamente en las elecciones de 2019 en segunda vuelta con el 72,71% de apoyo y el 56,81% de participación, algo más alta que el 48,98% que acudió hace cinco años a las urnas para elegir entre seis candidatos en la primera ronda.

Un sistema ultrapresidencialista

Soldados tunecinos llevan material electoral a un colegio electoral un día antes de las elecciones presidenciales en Túnez
Soldados tunecinos llevan material electoral a un colegio electoral un día antes de las elecciones presidenciales en Túnez. EFE/EPA/Mohamed Messara

En julio de 2021, en medio de la turbulencias políticas de la transición, el presidente suspendió el Parlamento y se arrogó plenos poderes, ante denuncias de “golpe de Estado”, y desde entonces ha instaurado un nuevo sistema ultrapresidencialista con una nueva Constitución aprobada en referendo (70% de abstención) que limita las funciones de la Cámara.

Los partidos políticos quedaron excluidos de las elecciones legislativas de 2022 que solo movilizaron al 11% del electorado.
Destacados disidentes han sido arrestados y más 170 personas continúan detenidas por motivos políticos o por ejercer sus derechos fundamentales, un centenar miembros o simpatizantes del partido islamista Ennahda, según Human Right Watch.

Dos candidatos, un presidente

Kais de 66 años era un desconocido profesor de derecho constitucional cuando llegó al poder en 2019, de tendencia conservadora y austera que prometió luchar contra la corrupción y responsabilizó a los partidos políticos de todas las dificultades de la transición.

Se presenta como candidato independiente apoyado por el llamado movimiento ciudadano 25 de julio, día en el que dio el polémico golpe de mano.

Otro candidato, considerado de paja, es Magzhaui, de 59 años, que apoyó entonces la intervención Said pero hoy se presenta como un crítico rival. Lidera el partido Movimiento Popular cuyo dirigente, Mohamed Brahmi, fue asesinado en 2013 en uno de los episodios más controvertidos de la transición.

El Parlamento de Túnez reabre 20 meses después de su suspensión, pero sin prensa

Ayachi Zammel, el más joven de los aspirantes con 47 años, fue detenidos horas antes de que se formalizara la lista oficial y durante la campaña electoral ha sido condenado en tres sentencias a un total de 14 años de cárcel.

A falta de sentencia definitiva, permanencia en la carrera presidencial y su equipo confía en que pueda hacer frente a Said para forzar una segunda vuelta.

Resultados para el 9 de octubre

Los resultados están previsto para el 9 de octubre según adelantó la instancia electoral (ISIE), cuya ejecutiva está nombrada por el presidente y que también ha estado en el punto de mira durante esta campaña.

La ISIE denegó la autorización a “I Watch” y Mourakiboun, dos conocidas organizaciones con implantación nacional que han observado hasta ahora los procesos democráticos de Túnez.